En toda relación, existen tensiones evidentes y el caso de un padre/madre e hijo no es distinto.

Es cierto que para un hijo, en ocasiones, el padre resulta molesto por sus sermones y claros discursos poco oportunos






En ocasiones se tienden a confundir roles, el hijo cree poder mandar al padre o llevar el control o el padre tiende a depender mucho del hijo. Y la complicación real está aquí, no en el hecho de que ocurran estas dos situaciones, sino en el intento por querer establecer autoridad (A lo cual sería conveniente aclarar, que Siempre será el padre/madre quien se encargue de esta, guste o no a los hijos (incluyéndome


Ahora, Las Escrituras hablan con claridad sobre esto.
Hijos: Un mandamiento fundamental “honra a tu padre y a tu madre, para que te vaya bien en la vida”. Allí no dice: “Honra a tu padre y a tu madre sólo si te tratan bien, si nunca te gritan, si nunca se equivocan, si son atractivos, si tienen prestigio” NO, allí dice: “honra a TU padre y a TU madre” sea como sea, como te haya tocado; si es bajito, poco agraciado, inoportuno, de mal carácter, poco importa, debes amarlo, es un mandamiento, ni siquiera es una sugerencia, porque tampoco dice: “Si quieres lo honras”, es algo indiscutible y luego agrega que si lo haces te irá bien en la vida, un beneficio por eso, cuando debiera nacerte solo.
En mi particular caso, tengo un padre terrenal (padre de sangre) que no ha sido el mayor ejemplo y hasta el día de hoy, continua en plan de no querer mejorar en nada, pero bueno, ¿qué he de hacer yo si Dios me dice: ”Hónrale”? Mi madre es genial (con todo y equivocaciones, que por último intenta superarse, a la cual aprovecho de agradecer por llevarme a los caminos del Señor) y mi padre casi un tirano



Padres: “No provoquéis a ira a vuestros hijos”. He conocido caso de padres que ciertamente se aprovechan de la bondad de los hijos


Ahora, ambos podéis argumentar: “Mi padre/hijo no piensa ni reflexiona sobre esto, no le importa, no escucha, no es comprensivo y yo verdaderamente sí lo intento”
Pues bien, si lo intenta, sólo deje de intentarlo y hágalo. Hay una pequeña línea delgada entre estos términos y es conveniente cruzarla, no retroceder. Yo también dije eso en un momento, pero que un día se me encendió la ampolleta y me dije: “Bueno, la del problema, si yo lo hago bien, no soy yo”. Hermanos míos, descansad en el hecho de que ustedes sí hacen lo correcto. No importa que el otro continúe así (en realidad sí, pero se soluciona de otro modo), existe una herramienta poderosa que se llama “oración”, sirve para hablar con su padre celestial (uno que siempre escucha) y este tiene la facultad de cambiar a quien sea, ¿para qué gastar las propias fuerzas si alguien más poderoso puede hacerlo por usted? Quien rendirá cuentas será la persona que hace las cosas mal, si usted lo hace bien, Dios que es justo santo y recto, hará justicia por su causa. Ahora si mínimamente le interesa la otra persona, órele a Jesús por esta y no quiera hacer el papel de Dios.
PD: no todo está textualmente sobre las citas bíblicas, mi cerebro no está capacitado para retener cada punto y coma


Referencias: (Efesios 6:1-4; Exodo 20:12)
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